Testimonio 20

«Como muchos abogados recién recibidos, egresé de la facultad sin mucha idea de cómo aplicar los conocimientos aprendidos, y con muchos conceptos estereotipados acerca de cómo debe ser un abogado. Que el abogado es infalible, intransigente, que sabe todo, y que impone su posición sin importar lo que quiere su cliente.

Cuando llegué a Rupturas Inteligentes a través del programa de “Acompañamiento para abogados noveles”, entendí que había otra manera de ejercer la profesión y que debía construirla en mí, porque solo yo podía decidir que abogado quería ser.

Entonces asumí que los abogados no somos infalibles, podemos equivocarnos, por eso debemos analizar en profundidad cada caso que nos llega; que si somos intransigentes nos estamos perdiendo de encontrar nuevos caminos, nuevas posiciones y herramientas que benefician a nuestro cliente; que no sabemos todo, porque no hay una sola manera de resolver un conflicto y debemos estar abiertos a todas las posibilidades; que imponer nuestra posición es una falta de respeto a nuestro cliente que es quien debe tomar las decisiones siempre, que debemos escucharlo y saber en todo momento que es lo que quiere.

Lo experimentado, sumado a ver como se prepara un abogado ante una consulta, una audiencia, el proceso que debe enfrentar, el análisis de la norma y todo lo que ésta nos proporciona, me enriqueció como persona y como profesional. Muchas gracias Rupturas Inteligentes. Muchas gracias Dra. Ana Laura Díaz.«